Los niños que juegan a videojuegos obtienen mejores resultados en pruebas de habilidades cognitivas: estudio

 Un nuevo y sorprendente estudio ha descubierto que los niños que declararon jugar a videojuegos durante tres horas o más al día obtuvieron mejores resultados en pruebas de habilidades cognitivas relacionadas con la memoria y el control de los impulsos, en comparación con otros que nunca jugaron a videojuegos.


"Este estudio se suma a nuestra creciente comprensión de las asociaciones entre jugar a videojuegos y el desarrollo del cerebro", dijo Nora Volkow, del Instituto Nacional de Abuso de Drogas, que respaldó el estudio de la Universidad de Vermont en Burlington.


"Numerosos estudios han relacionado los videojuegos con problemas de comportamiento y de salud mental. Este estudio sugiere que también puede haber beneficios cognitivos asociados a este popular pasatiempo, que merecen ser investigados más a fondo."


Este estudio sugiere que también puede haber beneficios cognitivos asociados a este popular pasatiempo, que merecen una mayor investigación".


Los investigadores afirman que los hallazgos sobre los beneficios cognitivos de los videojuegos no son una sorpresa total. Estudios anteriores más limitados habían sugerido lo mismo, aunque otros estudios también han relacionado el juego excesivo con problemas de comportamiento y salud mental.


Para cada grupo, los investigadores evaluaron el rendimiento de los niños en dos tareas que reflejaban su capacidad para controlar el comportamiento impulsivo y memorizar información, además de monitorizar la actividad cerebral de los niños mientras realizaban las tareas.


"Los investigadores descubrieron que los niños que declararon jugar a videojuegos tres o más horas al día eran más rápidos y precisos en ambas tareas cognitivas que los que nunca jugaban", señala el estudio.


Los análisis de imágenes cerebrales por resonancia magnética también descubrieron que los niños que jugaban a videojuegos durante tres o más horas al día mostraban una mayor actividad cerebral en regiones del cerebro relacionadas con la atención y la memoria que los que nunca jugaban.


El estudio reveló que los videojugadores tenían más actividad cerebral en las regiones frontales del cerebro, asociadas a tareas más exigentes desde el punto de vista cognitivo, y menos actividad cerebral en las regiones relacionadas con la visión.  


El estudio conjetura que jugar a videojuegos puede ser "exigente desde el punto de vista cognitivo" y puede mejorar el rendimiento.


Además, el estudio sugiere que la baja actividad en las áreas visuales del cerebro de los jugadores puede indicar que son más eficientes en el procesamiento de la información que los no jugadores, debido a la práctica repetitiva que proporcionan los videojuegos.


"Aunque en estudios anteriores se ha observado una relación entre los videojuegos y el aumento de la depresión, la violencia y el comportamiento agresivo, en este estudio no se ha observado esta relación", afirman los investigadores.


Los investigadores advierten que puede haber un sesgo selectivo que justifique más estudios.


"Podría ser que los niños que son buenos en este tipo de tareas cognitivas elijan jugar a videojuegos", señalan los investigadores.


Los autores también hicieron hincapié en que sus hallazgos no significan que los niños deban pasar "tiempo ilimitado en sus ordenadores, teléfonos móviles o televisores".


También advirtieron que algunos géneros específicos de juegos de friv, como los de acción y aventura, los de resolución de puzles, los deportivos o los de disparos, pueden tener efectos diferentes en el desarrollo cerebral, y que este nivel de especificidad en el tipo de juegos no se midió en este estudio.